The Frontier of Change in the Cuban Economy
Latin American Perspectives: A Journal on Capitalism and Socialism
Published online on May 12, 2014
Abstract
Beginning in 2008, the Cuban leadership recognized the need for change in its economic policy to overcome the legacy of the Special Period and the shortcomings of the economic model that prevailed until 1989. A product of widespread grassroots discussion, the guidelines for economic and social policy approved in 2011 include a greater role for market relations and nonstate property in the management of the economy. They also identify a new area of cooperative, mixed, and private property alongside of state ownership, promote decentralization of management and the participation of workers in this process, and place greater emphasis on personal consumption in the incentive system. The implementation of these changes is already having an effect on economic indicators, among them a significant reduction in imports, a decrease in gross fixed capital formation, a reduction of the budget deficit, and an increase in labor productivity. More complex and decisive changes can be expected in the years to come.
A partir de 2008, la dirigencia cubana reconoció la necesidad de un cambio en su política económica para superar el legado del Período Especial y las deficiencias del modelo económico que prevaleció hasta 1989. Un producto de la discusión popular generalizada, las pautas de la política económica y social aprobada en 2011 incluyen un mayor papel de las relaciones de mercado y de la propiedad no estatal en el manejo de la economía. También identifican una nueva área de la propiedad cooperativa, mixta y privada junto a la propiedad estatal, promueven la descentralización de la gestión y la participación de los trabajadores en este proceso, y ponen mayor énfasis en el consumo personal en el sistema de incentivos. La implementación de estos cambios ya está teniendo un efecto en los indicadores económicos, entre ellos una reducción significativa de las importaciones, la disminución de la formación bruta del capital fijo, una reducción del déficit presupuestario, y un aumento en la productividad del trabajo. En los próximos años se pueden esperar cambios más complejos y decisivos.